Monstruillos de papel
Es muy pequeño. Demasiado Pequeño. Más pequeño que una moneda. Mi familia y amigos no saben que existe. Solo nosotros sabemos de él, ¿Podrías guardar este gran secreto? Por favor, es muy tímido. Ahora mismo esta durmiendo en mi hombro.
Muy bien, les contaré. Tiene alas, pero no vuela. Garras afiladas, pero no rasguña. Su voz es tan poderosa, pero apenas es escuchada. Su piel es de piedra, y sus ojos son dos canicas doradas. Tiene de cola cascabeles. Anda en cuatro patas y es tan ágil como un gato. Su nombre es Azul, porque le gusta mirar el cielo y las nubes.
No recuerdo como fue. Si el vino a mi, o yo a él, pero estamos juntos en esto.
Cuando yo estoy en un lugar muy alto y las piernas me tiemblan, no quiero bajar por miedo a caer. Entonces, llega Azul. Salé de mi bolsillo, trepa por mi brazo y cuando se posa en mi oído, me dice: "Tranquilo. Un pasó a la vez, y no mires abajo".
Cuando yo estoy rodeado de un publico, Azul comienza a tener miedo. En esos casos suelo contar un chiste, y al escuchar la risa de los demás, entiende que existen buenas personas que... oh, esperen, Azul ya despertó.
Como les decía: "¿Qué hace un pez cuando lo arrojas al mar? Nada?"
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